En la tibieza de una noche oscura nos amamos en un lecho de rosas, sin espinas, fuiste mía La gente dice: ¡eso es pecado! Pero un pecado de amor es sagrado
Porque te quiero y me quieres Porque los dos nos queremos Y seguiremos unidos, aunque nos llamen ¡perdidos!
Que saben ellos de amores si nunca los han tenido Que saben de corazones que aman y dan cariño No saben nada de nada Y nos llaman ¡los perdidos!
No hay comentarios.:
Publicar un comentario
Espero tu amable comentario