miércoles, agosto 06, 2008

El tiempo ha llegado_ Mensaje de la Madre María a través de Carolina Rosas en Lima- Perú, 05/08/2008

Lo que van a leer son algunos aspectos del extenso dialogo de casi hora y media que tuvo la Madre Maria con un grupo de luz en el distrito de Surco, en Lima-Perù, a través de la Señora Carolina Rosas, quien muchas otras veces ha servido de intermediaria.

Ahora damos a conocer parte de este mensaje porque es necesario difundirlo para que muchos puedan entender la hora que nos toca vivir.

No existe una grabación del mensaje, por ello el lenguaje o la forma de reconstruirlo, es lo mas apegado a su sentido y conforme a la guía del espíritu y a lo que vuestro corazón entienda (Jesús Hubert)



Amados hijos:

Les decíamos que ya no había tiempo, que el tiempo se había acabado y muchos no lo entendieron. Y se produjo mucho desorden en sus vidas. Ahora les decimos que el TIEMPO ha llegado.

Este es el tiempo del cambio, de la transformación. No es un final, es un nuevo comienzo. La Tierra esta cambiando, y el hombre también está cambiando, incluso biológicamente, para las nuevas condiciones de existencia. Por supuesto, mas elevada, mas cerca de la esencia del Padre creador.

La sociedad en todo el mundo esta corriendo acelerada por afanes materiales, ilusorios. El mundo debe parar. Encontrarse cada hombre y cada mujer con su propio ser. No hay nada más importante en esta hora.

Tienen que prepararse porque ha comenzado la transición. Fortalézcanse, háganse fuertes en todos los aspectos. Sobre todo abran y calienten su corazón. La gran tarea es parar el friaje del corazón que está envolviendo a muchos. Vienen momentos en que su corazón tendrá que estar entrenado para amar sin hacer diferencias si un hijo es hijo suyo o del otro, de una madre o un padre, igual. Practiquen que todos somos uno, de la misma forma. Especialmente lleven una sonrisa, un pan o una palabra a quien lo necesite. Que los demás aprendan a amar, viéndolos, sintiéndolos amar, recibiendo vuestro amor.

En cuanto a los mandamientos, comprendan que las escrituras, los evangelios y demás revelaciones fueron en su conjunto para un tiempo determinado. Ustedes, en realidad, no proceden de hace 2000 o mas años que tienen esas escrituras, muchos de Ustedes ya vivían desde hace muchos miles de años antes. Y dentro de ustedes hay acumulada una sabiduría inmensa y que se manifestará cuando ustedes se decidan a conectarse con su ser esencial y manifestarlo en su vida diaria.

Comprendan que no hay mandamiento mayor que aquel que procede de vuestro corazón, de vuestro propio sentir, de vuestro propio ser. Y no hay mandamiento mas importante que el SER-vicio, es decir la manifestación de vuestro ser, de aquello que les dio el Padre, de esa parte de su ser que los hace UNO con èl.

No hay nada bueno, ni malo que siga aprisionando vuestro ser. Ni nada falso, ni nada verdadero en si mismo. Todo depende de lo que dice vuestro sentir. Algo que para Ustedes puede ser falso, para otros es verdadero. Solo pregúntense cada vez por qué y para qué quieren hacer o decir algo, eso es suficiente. Y sean ustedes mismos, sin ningún temor. Esa idea que solo deben ser “buenos”, como lo entiende la sociedad los ha estado oprimiendo por siglos. Hagan lo que sienten hacer, de acuerdo a lo que les dicta vuestro corazón.

Porque ese corazón, que es la luz Padre, sabe lo que su ser les permite o no con relación a vuestros hermanos por respeto hacia ellos y su libre albedrío. Porque el respeto es una de las formas mas sublimes del amor. Por ello es que las bases del ser humano serian el amor, el respeto y la humildad para formar una comunidad verdadera de seres humanos viviendo en sociedad.(*)

El conocimiento adquirido no los hace más que otros, a ustedes ni a nadie. Nadie es más ni menos que otro. Son solo etapas o momentos de evolución de cada uno. Cada uno de ustedes, sin excepción, están viviendo la forma, las condiciones de vida que decidieron venir a cumplir antes de encarnar en su vida presente.

Vinieron para armonizar, para equilibrar, para a-prender algo. Vinieron para incorporar algo que les faltaba y encenderlo como sabiduría en vuestro ser y re-encender todos los dones y riquezas de su propia luz e ir recuperando todo el maravilloso brillo de su chispa de luz original, tal como fueron creados por el Padre.

Todos son vehículos, canales, expresión de algún aspecto del Padre. Pero nadie puede olvidarse que todo procede de la fuente y levantar con orgullo su propia persona como el origen de los mensajes que recibe. Lo que reciben con amor de nosotros, deben darlo solo con amor y nada mas. Aquellos que piden dinero u otra cosa por esos mensajes que recibieron, recibirán lo que están sembrando, no como castigo, sino porque están creando lo contrario al amor con que se los dimos.

El cambio que ya ha empezado consiste en que una gran energía de luz está llegando del Padre y haciendo posible todo aquello que quiera ser y se manifieste como luz, el tiempo de la oscuridad ha terminado.

Por ello, basta que ustedes tomen alguna iniciativa para que todos nosotros desde el reino del Padre inmediatamente los ayudemos a hacerlo posible. Nunca han estado solos y ahora más que nunca cuenten con nosotros.

Cada pueblo recibirá los avisos que necesita para saber que este es el tiempo. No es el fin del mundo. Es solo el fin del mundo tal como lo han conocido hasta ahora.

Ascensión, elevación…ustedes le dan muchos nombres, pero el sentido es ese. La humanidad no termina, seguirá viviendo con nuevas características, en nuevas condiciones mas acordes con su ser de luz.

Una de esas nuevas formas de vivir consiste en que terminarán las fronteras y las diferencias entre los hombres. Todos comprenderán que son UNO.

Nunca he cuestionado la condición de virgen con que el Padre me permitió traer en mi vientre a Jesùs, pero cuando vengo hacia ustedes, yo me siento una mujer exactamente como cualquiera y cada una de ustedes y por eso les pido, por todo el amor que les tengo, sin ninguna excepción, que cuando me llamen, o me nombren, me digan solo madre, tal como me siento, una madre mas de todos ustedes.

Abran su corazón, amen con ese inmenso e infinito amor que les tenemos a cada uno de ustedes. Siempre estoy junto a Ustedes.

Madre María, Lima-Perú, 05 de Agosto de 2008

(*) Precisiòn transmitida por la Madre Maria a travès del mismo canal, despuès de publicado el mensaje.