sábado, diciembre 05, 2009

Honduras: Avanza el peligroso experimento autoritario _ Escribe: Guillermo Giacosa / Perú 21



Hablar de democracia y elecciones en Uruguay y Honduras no significa lo mismo.

Dijimos días antes de las elecciones en Honduras y Uruguay que iban a ser mas bien lecciones. Y así ha sido.

Sobre el impecable triunfó del Frente Amplio en Uruguay, de momento no hay nada mas que decir. En cambio, en el caso de Honduras, el experimento golpista y mañoso parece estarse consolidando bajo aparentes formas democráticas y por tanto la amenaza para el avance popular en el continente, sigue creciendo.

Conozcamos detalles en este franco análisis de Guillermo Giacosa.(Jesús Hubert)


La BBC de Londres publicó la opinión de uno de sus lectores sobre las elecciones en Honduras: “Si estas elecciones sirven para salir de una crisis que entró en un callejón sin salida, una nueva evaluación será más que necesaria, sin olvidar que lo sucedido es un simple golpe de Estado repudiable e inaceptable por la OEA y la ONU”. Seguramente la BBC ha elegido, entre otros muchos, este correo que refleja el único argumento que pueden exhibir quienes, sin decirlo y quizá sin querer, están convalidando el golpe de Estado contra Mel Zelaya. Parece razonable y seguramente será lo que dirán por estas tierras no pocos de nuestros sensatos analistas y casi todos los políticos que, más allá de sus diferencias, defienden un orden establecido que no incluye a vastos sectores de la población y donde los relatos de la corrupción nuestra de cada día son el alimento con el que lo medios de comunicación nutren mayoritariamente a sus clientes.

Las elecciones en Honduras no son una salida. Por el contrario, son una farsa destinada a tantear reacciones en el continente y ganar tiempo mientras el sistema perfecciona los nuevos golpes de Estado que comenzarán a producirse en el resto del continente. Ya uno de sus voceros menos lúcidos nos advirtió de que el peligro de los tiempos actuales no son los golpes de Estado, sino los mandatarios que pretenden perpetuarse en el poder –siempre y cuando no se llamen Álvaro Uribe, por supuesto–. En realidad, lo de perpetuarse en el poder es una forma de decir “Mandatarios: no pretendan hacer transformaciones que perjudiquen los intereses de los grandes poderes económicos”.

No es mi intención, en esta nota, discutir los pro y los contra de esas transformaciones sino, simplemente, repetir una verdad de Perogrullo: es bueno y democrático lo que beneficia a los grandes capitales, y es malo y dictatorial lo que los perjudica. Tan evidente es lo que afirmo que me produce vergüenza tener que repetirlo como si, de repente, hubiese descubierto una gran verdad. Es una obviedad que desnuda la lucha entre un sector que no quiere perder ni uno solo de sus muchos privilegios, y otro que aspira a poder comer todos los días y recuperar, además, la esperanza de creer que la vida no es la fatal sucesión de frustraciones a las que están expuestos.

Mel Zelaya, con cambios que no alteraban las estructuras tradicionales, ofreció esa esperanza a los hondureños, y la respuesta fue la resistencia que hoy estamos viendo. Respecto a la trama de esta trampa de probeta, el papel jugado por la prensa también la delata. CNN, vocera de quienes sabemos, decía el día de las elecciones que en Honduras había salido a votar un 70% de la población en paz, mientras quienes veíamos simultáneamente Telesur asistíamos a los bombazos y a la persecución militar y policial en San Pedro Sula. Quizá, lo admitimos, los paradigmas ideológicos de CNN no le permitan ver aquello que contradice sus intereses y ellos crean, honestamente, estar diciendo la verdad. Ocurre. Es raro, pero ocurre. Sobre todo en CNN.

Publicado originalmente con el titulo: “Honduras: elección es test para otros atropellos “ - diario “Perú 21” - 04/12/2009