martes, febrero 24, 2009

El estado peruano: una “teta” que da muy poco… _ Escribe: Cecilia Blondet / Perú 21

Considero que el comentario de Cecilia Blondet acerca de los recientes triunfos mundiales de tres peruanas en el deporte y en el cine, descubre lo que está detrás del brillo de los flashes y los reflectores.

Estamos de acuerdo con ella en que una…dos …o tres golondrinas, en este caso, no hacen verano, ni tampoco un país.

Sin embargo, no podemos desconocer el inmenso mérito de quienes, sin mayor apoyo del estado peruano, han sabido poner muy en alto el nombre de la patria y llenar de sano orgullo a sus connacionales.

Estas chicas, si sudaron la camiseta y metieron verdaderos “goles” mundiales, sin contar con las vergonzosas e inmerecidas gollerías y privilegios de que gozan impunemente los mediocres futbolistas profesionales, en el Perù.

Con pundonor, Kina “Dinamita” Malpartida, asi como Claudia Llosa y Magali Solier, al igual que el chef Gastón Acurio, o el tenor Juan Diego Flórez, van dibujando el nuevo rostro del Perú.

Quienes van constituyendo asi una verdadera vanguardia, auntèntica y honesta, que confirma el aserto de nuestro genial César Vallejo: “Todo acto o voz genial, viene del pueblo y va hacia él”.

No nos durmamos en nuestro laureles, con Vallejo, también afirmemos, en conciencia, que aun “hay muchísimo que hacer”.(Jesús Hubert)

Tenemos que estar contentas las mujeres peruanas. En dos semanas hemos visto triunfar en exigentes escenarios internacionales a jóvenes compatriotas que han destacado en actividades por lo general masculinas y sin apoyo del Estado. Kina 'Dinamita’ Malpartida se acaba de coronar campeona mundial de box en la categoría súper pluma y Claudia Llosa ganó el Oso de Oro en la Berlinale con su película La teta asustada, el premio mayor del prestigioso festival europeo, nunca antes conseguido por un peruano. Magaly Solier y María del Pilar Guerrero, las actrices de la película ganadora, acompañaron a la directora, y la huantina Solier se dio el gusto de cantar en quechua una canción suya a su madre en la noche de gala de la Berlinale. ¡Fantástica!

Es interesante destacar el hecho de que las cuatro mujeres vienen de distintos lugares, unas de la sierra y otras de la capital, de distintas clases sociales, con diferentes experiencias en la mochila, pero con un común denominador: son jóvenes del siglo XXI, lo que les permite, como sea, acceder a la vida pública. A nadie sorprende hoy que una mujer pueda ser barredora, referí de fútbol, cineasta, boxeadora o presidenta. La revolución de los roles de las mujeres le permitió a Magaly y a Pilar aceptar la invitación de Claudia para dejar sus humildes trabajos y atreverse a desafiar su destino.

Hemos avanzado notablemente. Cincuenta años atrás, las mujeres se quedaban en su casa, unas para ser la 'reina del hogar’, otras para ser la esclava, pero siempre en casa. A la calle se iba y venía para las compras o a la procesión, pero no para quedarse y tampoco para trabajar. Algunas osadas lo lograron y fueron las primeras profesionales, las maestras y las enfermeras, que abrieron la trocha.

Pero, a pesar de la grandiosa sonrisa de las triunfadoras de la quincena, hay que decir que nos falta mucho camino por recorrer. En Apurímac, Huancavelica, Ayacucho, Cajamarca y Huánuco, el porcentaje de mujeres analfabetas va de 32.2 a 23.8. Es decir, en promedio, un tercio de las mujeres de estas regiones no saben leer ni escribir, ni han ido nunca a la escuela. ¿Es eso posible en el siglo XXI, el de las oportunidades para las mujeres?

En el Perú, a pesar de las campañas realizadas (muy publicitadas por el gobierno), el analfabetismo continúa siendo un problema femenino localizado en algunas zonas de la sierra. Aun cuando se ha reducido el porcentaje en aproximadamente 10 puntos en relación con el censo de 1993, este sigue siendo vergonzosamente alto. Esta brecha entre las mujeres urbanas y las rurales nos debe estremecer, y las mujeres huantinas, las de Ambo, Pacucha o las de Celendín, deben tener iguales oportunidades que las que tuvo Magaly Solier, pero no por encontrarse con Claudia Llosa, sino por ser ciudadanas peruanas. Como tales, deben tener la posibilidad de acceder a una buena educación y de escoger luego qué quieren hacer de su vida.

Este articulo fue publicado con el título “Unas y otras”, en el Diario Perú 21, el Martes 24 feb de 2009