Parece un juego, pero así funciona el poder imperial. Con los labios hablan de democracia pero sus verdaderos intereses son los que determinan la suerte de sus aliados y cómplices en el mundo.
Esta entrevista del diario El Libertador a la periodista norteamericana Eva Golinger es muy reveladora para entender por qué apesar de toda la presión internacional los golpistas hondureños gozan de buena salud.(Jesús Hubert)
EE. UU. apoya al régimen golpistas hondureño desde la base militar estadounidense, ubicada en la región central de Honduras, conocida como Soto Cano (Palmerola), ha sido centro de operaciones permanente para mantener la dictadura, por ahí se sacó por la fuerza el día del golpe de Estado al Presidente Zelaya.
Eva Golinger (Nueva York, 1973), abogada, periodista y autora de varios libros. En sus últimas obras ha investigado la injerencia política de Estados Unidos en America Latina. Su más reciente publicación es “La Telaraña imperial: Enciclopedia de injerencia y subversión”, 2008, Caracas.
“Quítenle cinco minutos las armas y el gobierno de facto cae”, declaró públicamente el Presidente constitucional Manuel Zelaya. Como “medio de presión” al regimén usurpador, Estados Unidos ha anunciado la supreción de 16 millones de dólares, de un total de 260 miliones, a las Fuerzas Armadas hondureñas.
Por Manola Romalo
Especial para EL LIBERTADOR
¿Qué papel ha jugado Estados Unidos en golpe de Estado en Honduras?
Eva Golinger: Realmente el gobierno de Estados Unidos no ha tomado ninguna medida para presionar a las Fuerzas Armadas hondureñas en el golpe de Estado ¿Por qué digo eso? Porque no fue el Pentágono que suspendió 16 millones de dólares, sino el Departamento de Estado. Y el dinero que anunció que estaban suspendiendo ya había sido entregado. Entonces, no era una medida real sino simplemente un distractor de la opinión pública, debido a las presiones sobre Washington frente a este golpe de Estado. Tampoco EE. UU. ha actuado de forma contundente. El Pentágono, el gobierno de Estados Unidos no ha ejercido ninguna presión directa sobre el regimén golpista de Honduras. Han seguido apoyando a las Fuerzas Armadas hondureñas desde la base Soto Cano (Palmerola), base militar estadounidense asentada en la zona central de Honduras. Vimos como se ha utilizado esta base militar para una reunión secreta que se realizó el viernes 2 de octubre, entre el Secretario General de la Organización de Estados Americanos (OEA), José Miguel Insulza, con el dictador Roberto Micheletti. También estaba presente el embajador de Estados Unidos en Honduras, Hugo Llorens.
¿Por qué la base de Palmerola para este encuentro?
EG. Porque está controlada por EE. UU. Esta base militar es un centro de operaciones que apoya el regimén golpista. Sabemos también que por ahí sacaron por la fuerza hacia Costa Rica al Presidente Manuel Zelaya, el 28 de junio pasado, el día del golpe de Estado. A Zelaya lo extraditaron por ahí con el pleno conocimiento de los militares estadounidenses. ¿Entonces en qué han limitado el apoyo? Han limitado a las Fuerzas Armadas hondurenas a participar en maniobras, en ejercicios militares con los estadounidenses. Pero la realidad es que ¡no ha cambiado absolutamente nada en la relación entre EE. UU. y Honduras! Y las declaraciones de los voceros de Washington, incluyendo la Secretaria de Estado, Hillary Clinton, no han producido acciones reales. Han sido declaraciones que pueden interpretarse como cierta presión, llamando para una solución a esa crisis, diciendo que no van a reconocer a Micheletti como el presidente legítimo, sino de facto. Sin embargo, por la via real no han retirado el embajador en Honduras. La relación diplomática sigue con normalidad como si no hubiera sucedido nada, cuando la mayoría de países europeos y latinoamericanos rompieron relaciones diplomaticas. Estados Unidos fue el único país de la América que no lo hizo.
¿Cuánto dinero recibe actualmente Honduras de Estados Unidos?
EG. Han dicho que suspendieran una parte de los aportes de la Agencia de los Estados Unidos para el Desarrollo Internacional (USAID, sigla en inglés), el “Centro Internacional de Desarollo de Estados Unidos” que iba directamente al gobierno. Pero ese dinero ya se había entregado para este año. Además, la gran mayoria del dinero que realmente EE. UU. está dando a Honduras a través del Departamento de Estado por medio de USAID, no va directamente al gobierno, si no a partidos politicos, a grupos empresariales, a diferentes Organizaciones No Gubernamentales (ONGs) y a medios de comunicación. Está comprobado que estos grupos han apoyado el golpe y siguen apoyándolo. Igual, los fondos de la “Cuenta del Milenio” del Departamento de Estado, que suman unos 270 millones de dólares no han sido suspendidos. Para 2009, 49 millones de USAID van a lo que llaman la “sociedad civil”. En 2010 la cantidad de dinero que la USAID destina a estos grupos de Honduras aumentará a 68 millones de dolares. Tampoco este dinero ha sido suspendido. Aparte, hay un presupuesto del Pentágono pero no conozco la cifra. Esta información no la publican. Pero lo que invierten en el mantenimiento de la base militar en Palmerola: el equipamiento y el entrenamiento de las Fuerzas Armada hondurena no ha sido suspendido ni tocado. Cuando Zelaya dice que el regimén dictatorial en Honduras se mantiene porque el apoyo de Estados Unidos continua, es correcto. Si realmente la intención era presionar y asfixiar el regimén golpista en Honduras para forzar su salida, Estados Unidos hubiese actuado de una forma muchisimo más contundente. Pero nunca su objetivo nunca ha sido botar a la dictadura, ha sido alargar un proceso de permanencia hasta las elecciones de noviembre próximo, para no permitir nunca el regresó al poder del Presidente Manuel Zelaya. Que Manuel Zelaya se reinstale en el poder, de ninguna forma va a suceder, pues se evita que tenga alguna influencia en el gobierno siguiente. Aunque Zelaya retornara al poder mañana, no importa. ¿Qué va hacer en un més? Esto sería algo ridículo que no se deberia permitir. Si Manuel Zelaya regresara al poder, tendría que recuperar tres meses, tres meses y media perdidos por el golpe de Estado. Pero siempre la intención de EE. UU. ha sido aislarlo este proceso y alargar el tiempo hasta llegar a las elecciones. Y cuando se elija un nuevo Presidente ¡se legitima todo! Y se olvida el golpe de Estado.
En una carta incendiaria enviada el 9 de agosto 2009 a Hugo Llorens, embajador de Estados Unidos en Honduras, (“EL LIBERTADOR”, 17.08.09), Manuel Zelaya y su Cabinete lo responsabiliza junto a Hillary Clinton, por “acción u omisión” de haber “derramamiento de sangre del pueblo hondureño.” ¿Qué papel tiene Hugo Llorens en el golpe de Estado?
E.G. Hugo Llorens, el embajador de EE. UU. en Tegucigalpa, es un personaje con un pasado muy agudo, estuvo involucrado en el golpe de Estado en Venezuela en 2002. El tenía en este momento en Washington un cargo en el Consejo de Seguridad Nacional como coordinador de los países andinos, incluyendo Venezuela. Èl coordinaba América Latina en el Departamento de Estado con Otto Reich, subsecretario de Estado para el Hemisferio Occidental. Llorens es un cubano de nacimiento, que llegó a Miami con la operación Peter Pan de la CIA. Èl pertenece a ese grupo de la extrema derecha de Estados Unidos que maneja la politica sobre America Latina y que busca siempre desestabilizar cualquier gobierno de tendencia izquierdista. Entonces su papel en este golpe, obviamente, ha sido muy destacado en el caso de Honduras. Porque se habia reunido en los días anteriores, incluso dos meses antes del golpe, con los sectores golpistas. Sabia que tenian esos planes, ayudó a coordinarlos. Y, una vez ejecutado el golpe, incluso la embajada de Estados Unidos sabía. En la mañana del golpe de Estado, el embajador de Estados Unidos sabía que estaban secuestrando el Presidente Manuel Zelaya.
¿Qué pruebas hay?
E.G. Porque en el momento que secuestran el Presidente Zelaya, lo montan al avión y lo sacaron por la fuerza del país, la embajada envió un carro a buscar la esposa de Zelaya, la Primera Dama Xiomara Castro. Ella se encontraba fuera de Tegucigalpa, como a cuatro horas de la capital. El carro llegó a buscarla entre 9 y 10 de la manana, dos horas después que Zelaya había sido deportado del país. Mientras estaban secuestrando Zelaya y sacandolo del país - esto tardó como una hora y media, después que el avión saliera a Costa Rica, estaba ya el carro de la embajada en camino hasta la Primera Dama. Esto lo cuenta ella misma.
Significa que era una acción simultánea. Es decir, ellos sabían que se estaba sacando al Presidente del país, la embajada va y busca la Primera Dama y la lleva a la embajada de los Estados Unidos. Esto comprueba que Estados Unidos sabía qué pasaba cada minuto. Y no hicieron nada. Ni luego, cuando Zelaya fue sacado del país en un avión de la base militar de Palmerola. No hay duda que el gobierno de Estados Unidos ha tenido una participación clave y directa en el golpe de Estado en Honduras.
*/Entrevista tomada por la periodista Manola Romalo, que reside en Frankfurt, Alemania.
Publicada originalmente con el titulo:
Entrevista a Eva Golinger: “Estados Unidos ha jugado un papel destacado en el golpe de Honduras”
Publicado en el diario EL LIBERTADOR de Honduras, edición del 13/10/2009