viernes, julio 22, 2011

Facundo Cabral: A los 13 días de su renacimiento




No te quedes en la anécdota,

no digas que murió,

que dejó un espacio en la tierra.

Con su muerte

empieza a vivir,

más que en sus 74 años.


No te quedes con lo humano,

anda más arriba.

Gracias a su muerte trágica

ahora su sabiduría llega a muchos más.

Y recuerda, también fue un hombre,

como tú.

No lo pontifiques,

que no interesa el mensajero, sino el mensaje.

Facundo

ya estaba maduro,

la semilla Cabral

estaba lista para multiplicarse

¡Alégrate!
¡Facundo... ya resucitó!

(Viviana Menichetti-Jesús Hubert)


No soy de aquí, ni soy de allá


No soy de aquí, ni soy de allá
(Facundo Cabral)

Me gustan los que se callan

y me gustan los que cantan

y de tanto andar conmigo

me gusta lo que me pesa,

me pasan cosas como esta…

aunque no tenga importancia andar contándole a todos,

todas las cosas que pasan,

porque uno no vive solo

y lo que a uno le pasa

le esta sucediendo al mundo

única razón…

y causa,

pues todito es tan perfecto

porque perfecto es Dios,

que se mueve alguna estrella

cuando arranco una flor,

por eso, si hay uno, hay dos.



Supe del diablo la noche

que al hambriento dije NO…

también esa noche supe

que el diablo es hijo de Dios.


Ando solo por la vida

con un tono y dominante

modestamente cantor

sin pretensión de enseñar

porque si el mundo es redondo

no se que es ir adelante.



Andar y andar

siempre andando

nada mas que por andar…

no vine a explicar al mundo,

solo vine a tocar.

No quiero juzgar al hombre

al hombre quiero contar,

mi condición es la vida

y mi camino cantar, CANTAR…

y contar la vida

…es mi manera de vivir.


Un día llegué a Tandin

y conocí a un anciano

que a falta de inteligencia

se le dio por ser muy sabio,

le pregunte por Jesús una noche

al lindo viejo

y hay mismo lo conocí,

cuando me alcanzó un espejo.


Yo bailo con mi canción

y no con la que me tocan,

yo no soy la libertad,

pero si el que la provoca.

Si ya conozco el camino,

para que voy a andar al costado.

Si la libertad me gusta,

para que voy a vivir de esclavo.

Elegir,

yo siempre elijo, más que por mi,

por mi hermano.

Y si he elegido ser águila

fue por amor al gusano,

prefiero seguir a pie

y no en caballo prestado,

alguien por una manzana,

para siempre

quedó endeudado.


Siempre se llega primero

el que va más descargado.

El día que yo me muera,

no abrá que usar la balanza,

pues para velar a un cantor

con una milonga, alcanza.


Doy la cara al enemigo,

la espalda al buen comentario,

porque el que acepta un halago

empieza a ser dominado.

El hombre le hace caricias al caballo

…para montarlo.


Perdón, si me propase

y me puse moralejo,

nadie puede dar consejos,

no hay hombre que sea tan viejo.

Me pongo el sol al hombro

y el mundo es amarillo.

Me gusta andar…

pero no sigo el camino,

pues lo seguro ya no tiene misterio.

Me gusta ir con el verano muy lejos,

pero volver donde mi madre en invierno.

Y ver los perros que jamás me olvidaron

y los caballos

y los abrazos que me dan mis hermanos

…me gusta

…me gusta

…me gusta


Me gusta el mar y la mujer cuando llora

las golondrinas y las malas señoras

saltar balcones y abrir las ventanas

y las muchachas en abril

Me gusta el vino tanto como las flores

y los amantes, pero no los señores

me encanta ser amigo de los ladrones

y las canciones en francés

No soy de aquí, ni soy de allá

no tengo edad, ni porvenir

y ser feliz es mi color

de identidad

Me gusta estar tirado siempre en la arena

y en bicicleta perseguir a Manuela

y todo el tiempo para ver las estrellas

con la María en el trigal

No soy de aquí, ni soy de allá

no tengo edad, ni porvenir

y ser feliz es mi color

de identidad